En los tiempos que corren, los videojuegos alcanzan un nivel deperfección de imagen y sonido casi reales. Se interactúa con personasvirtuales y se juega en comunidad. Pero no solo eso, también seproducen bandas sonoras específicamente pensadas para esta industria,grabadas incluso por sinfónicas y adaptadas a cada momento de laacción. En este contexto, hoy, cuesta mucho imaginar de qué maneraempezó todo aquello, con un sistema arcaico, básico, simple... pero ala vez complicadísimo de implementar, precisamente por esa escasez derecursos. Todo para lograr un sinfín de notas a una voz, o a lo sumo a tres, que nos acompañaban en las aventuras del boom de lasvideoconsolas y ordenadores personales. Dinamic fue seguramente una de las productoras más activas de aquellos locos y rápidos 80. Multitudde juegos ideados y creados con temas musicales propios.Los jóvenes protagonistas en aquellos años pioneros le mostrarán cómose gestó todo aquello, entre anécdotas, chistes privados sobre pijamas de monos, viajes y diversión, que combinaban con el intenso trabajo,y en el contexto de una época de avances, una activa cultura