En un futuro no muy lejano, cuando La Red ya lo decide casi todo y lainmortalidad virtual se ha convertido en una promesa factible, unanciano de ciento cuarenta y un años se enfrenta a un horizonte dondeel pasado se funde con el presente y la realidad se desdibuja. No esningún perturbado. Sus palabras, melancólicas notas dispersas escritas en 2194 desde una curiosa residencia de ancianos, nos invitan a unviaje insólito que trasciende épocas.Una novela prodigiosa que explora la naturaleza de la memoria, lafragilidad de la identidad personal y el lugar de la humanidad en unfuturo donde la digitalización fuera de control lo reduce todo a ruido y ceniza."Una novela fascinante escrita por un filósofo que sabe explicarhistorias con ironía e inteligencia". -Gregorio Luri"La literatura que se resuelve a sí misma como incógnita está en estelibro inconformista y brillante que refuta los mundos previsibles,como es costumbre en su autor". -Ramón Andrés