Cuando la radio y la televisión no existían, la prensa era el medio de comunicación privilegiado para reflejar, y delinear, la realidad. Información, educación, recreación, opinión, todo parecía caber en un periódico. Pero en la evolución hacia un periodismo destinado a públicos específicos se reveló una ausencia: la mujer, productora o destinataria. Formadas durante siglos para ser útiles a su propia subordinación, las mujeres habían aceptado la idea de su inferioridad. Durante el gobierno de Rivadavia, el decreto de creación de la Sociedad de Beneficencia consideraba la existencia social de las mujeres como "aún demasiado vaga e incierta". Era imprescindible su emancipación intelectual y moral. Inspirada en esa idea, la prensa femenina se propuso difundir la misión de la mujer en la sociedad. Para conseguirlo debía instruir y al mismo tiempo instituir a su público.
Mujeres de prensa recorre desde el nacimiento los primeros cien años de periodismo femenino en la Argentina, desde comienzos del siglo XIX hasta principios del siglo XX. Las mujeres, para hacerse visibles, para definir los con