Las inversiones no tienen por qué ser complicadas ni exclusivas; si en la actualidad contamos con una cuenta bancaria y un teléfono móvil, podemos iniciar una cuenta de inversiones que nos permita adquirir bonos, acciones de empresas a nivel global, participaciones en bienes inmuebles y divisas e incluso criptomonedas. ¿Lo mejor? Ni siquiera tenemos que salir de casa para realizarlo.