Y este insano deseo de escapar con una daga anclada en las costillas, y este rumor vacío de calaveras a contraluz que me invade mientras la noche afila mis heridas, cuando cerrar los ojos ha de ser un viaje a las llanuras húerfanas de tiempo donde
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información