Pocas novelas recientes han dejado una huella tan honda como esta. Elverano en que mi madre tuvo los ojos verdes se ha convertido, desde su publicación, en un clásico contemporáneo: un relato feroz ydeslumbrante sobre el amor y la reparación, sobre la memoria y lascicatrices que no se borran. Más de 80.000 lectores se han estremecido ya con esta historia luminosa y brutal, que regresa ahora en unaedición especial y limitada, acompañada de una introducción inédita de Tatiana ?îbuleac. Un homenaje al milagro irrepetible de un libro quesigue creciendo con cada lectura.Aleksy aún recuerda el último verano que pasó con su madre. Cuando supsiquiatra le recomienda revivir esa época como posible remedio albloqueo artístico que sufre como pintor, vuelve a verse sacudido porlas emociones que lo asediaron cuando ambos llegaron de vacaciones aun pueblito francés. ¿Cómo superar la desaparición de su hermana?¿Cómo perdonar a la madre que lo rechazó? ¿Cómo enfrentarse a laenfermedad que la está consumiendo? Este es el relato de un verano dereconciliación en el que madre e hijo por fin bajarán las armas,espoleados por la ll