«Con el latín y el griego como máquinas del tiempo he viajado a épocas remotas, he oído palabras extrañas y bellas, he conocido a personajes de todo tipo, he sabido de combates y amores, he contemplado el afán de otros por sacarle al mundo su misterio y, ahora, quiero compartir algunas de esas cosas con quienes quieran saber de ellas». Partiendo de su dilatada experiencia como docente, editor y traductor de clásicos antiguos y modernos, Francisco Socas ha armado una serie de ensayos que encierran discusiones sobre temas candentes, paradojas y desmentidos de errores celebrados. Autores y textos anónimos, desde Lucrecio a Juvenal, desde Petrarca a los clandestinos precursores de las Luces, acuden a estas páginas para hablarle al hombre de hoy, plantando al desgaire sus huellas a lo largo de una senda que invita a un entretenido paseo. Aunque elegantemente elusivo cuando se trata de dar noticia de sí mismo, el autor juzga de cuestiones muy diversas a partir de sus lecturas y también de su experiencia de vida, en lúcidas reflexiones que no caen en la solemnidad al contrario, hacen gala de desinhibida franqueza n