En El libro de los seres imaginarios, Borges y Margarita Guerreroofrecen una sugerencia a los lectores: «Este libro no ha sido escritopara una lectura consecutiva. Querríamos que los curiosos lofrecuentaran, como quien juega con las formas cambiantes que revela un calidoscopio». Y Bestiaria recoge esta invitación. A la manera deHerbaria (Libros del Zorro Rojo, 2024), este volumen propone unaexploración visual y simbólica de la naturaleza, en este caso delreino animal. Inspirado en los antiguos bestiarios ?aquelloscompendios ilustrados que, más que estudiar a los animales con rigorcientífico, extraían de ellos significados morales y espirituales?,Bestiaria celebra la convivencia entre lo real y lo imaginario, unterreno donde la biología se confunde con el mito.El primer bestiario, editado en Alejandría entre los siglos II y IIId.C., fue el germen de una tradición que despuntaría en la Edad Media. Aunque no se les tuviese en mayor estima durante la Ilustración,estos libros ilustrados desempeñaron un papel crucial en una época enla que la imagen servía como medio de transmisión de conocimiento.Bestiaria explora