Epicuro desdeña toda ciencia que no enseñe al hombre a ser más feliz. Practica el único arte verdadero, el arte de vivir, del que es un maestro consumado.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información