El neorrealismo italiano constituye uno de los movimientos artísticos más influyentes y brillantes de la historia del cine. Este libro propone un recorrido alrededor de sus figuras más destacadas, sobre sus películas más significativas, el cual se inicia en los años treinta, con los primeros signos de una nueva sensibilidad estética en filmes como Tierra madre (Alessandro Blasetti, 1931) u Ossessione (Luchino Visconti 1943), pasando por sus años de esplendor en la inmediata posguerra, cuando directores como Roberto Rossellini, Vittorio De Sica, Giuseppe De Santis o Alberto Lattuada, articularon una nueva mirada cinematográfica sobre la realidad. El texto también explora en su lánguido ocaso, entre finales de los cincuenta y comienzos de los sesenta, cuando el llamado miracolo economico transformó profundamente el paisaje social y cultural de Italia, y el cine evolucionó hacia otras formas expresivas, si bien el neorrealismo aún tuvo fuerzas para inspirar las primeras obras maestras de Michelangelo Antonioni, Pier Paolo Pasolini y Francesco Rosi.
Nacido de las ruinas materiales y morales de