Desde la ventana de la habitación de un hotel, frente al iluminado campanario que siglos atrás fuera alminar, Antonio Muñoz Molina nos asoma a una Córdoba a lomos de las monturas musulmanas que traspasaron las murallas.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información