Meterse en el hábito de una monja o buscar la respiración boca a boca de la profe de natación son algunas de las inocentes ocurrencias de Spirou... que para su pesar no terminan como él imagina, ¡pero sí que nos hacen reír!
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información