Dos mujeres, un Chevrolet y el desierto de Arizona bajo la canículadel mes de julio son elementos más que suficientes para que José LuisGarci escriba un relato erótico de género negro, con aroma a películade Hollywood. Pero, además, esta road movie que atraviesa el MonumentValley donde John Ford ambientó sus westerns y, de motel en motel,busca la libertad al otro lado de la frontera mexicana, es unahistoria en la que la amenaza de la muerte se mitiga con sexoexplícito, contado con la misma alegría y detallismo con el que Miguel Navia?placer de voyeurs? lo dibuja.