El escort Leo no consigue olvidar a Takahiro, el jefe con el que seinició en el sexo anal, y por eso ya no puede acostarse con mujeres.Le suplica a Takahiro que lo hagan una vez más, y de convertirse enfollamigos pasan a vivir juntos. Cada día es un desenfreno quesobrepasa todos los límites. Cuando Leo empieza a sospechar que legusta, una clienta le pide que duerma con ella. Takahiro se losencuentra en plena acción, los celos le hacen perder la calma y se lotira con rabia ante la mirada de esa importante clienta...