Tras su poemario Cuerpos perdidos en las morgues (Ultramarinos, 2018), que le valió a Xaime Martínez el Premio Nacional de Poesía Joven «Miguel Hernández», y después de haber tomado la decisión de consagrar su escritura a la lengua asturiana, el autor nos entrega ùrecurriendo de nuevo en cierto modo a los muertosù otra muestra de vitalidad poética, que desde ya merece hacerse un hueco entre lo mejor de las letras peninsulares recientes por su contribución al lenguaje. Radicado ùporque no se puede mirar para otro ladoù en el contexto presente del Movimientu pola oficialidá de la llingua asturiana, Xaime Martínez (Uviéu, 1993) recurre a la tradición del etnodrama, un concepto de la antropología teatral que, como sucede en este libro, escenifica la dimensión ritual de una identidad cultural, la asturiana en este caso. La reunión en torno al fuego de un poeta y una sarta de ilustres muertos (noche de Walpurguis tomada por el orbayo), una extravagante mascarada de invierno (con sonido Nueva Orleans de fondo: «my grandma and your grandma / Were sittinÆ by the fire») y una epopeya zoomórfica protagonizada por el