¡Mírate al espejo y saca la lengua como si fueras una inquieta ranita o frunce el ceño como un oso enfadado! Los niños reconocerán sus emociones a través de la imitación: alegría, tristeza, miedo, nerviosismo y muchas más.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceiros, para mellorar a súa experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta o seu uso.Máis información