Educar es ponerse en la piel de cada estudiante, averiguar lo quenecesita, dotarle de herramientas para extraer lo mejor de él o deella, ayudarle a averiguar quién es y proporcionarle recursos paradesarrollar las habilidades, propias e inigualables, con las queafrontar los retos que deberá abordar a lo largo de su vida. Y estamisión docente es mucho más grandiosa que limitarse a impartir unconjunto de contenidos, evaluar los resultados y poner una nota finalque acabe "juzgando" unas capacidades a menudo engañosas. El problemaestá en que educamos para que asientan a las explicaciones de losdocentes, para que realicen los mismos exámenes en los que exigimosrespuestas idénticas... En definitiva, coartamos la creatividad y suiniciativa. Les decimos exactamente cómo tienen que pensar.
Este libro se dirige fundamentalmente a tres de los actoresprincipales en los que se asienta el escenario educativo (estudiantes, profesorado y familias), con el fin de esclarecer sus interrogantes y dudas, proporcionando herramientas de tipo pedagógico, metodológico o tecnológico para su resolución. Precisamente por ello, l