Este volumen quiere ser una reivindicación de la figura del traductor en un periodo particularmente importante para la Historia de España, la Edad de Plata (1902-1936), en el que tantos avances se produjeron, especialmente en el campo cultural, que quedaron truncados por la Guerra Civil. Junto a las grandes figuras literarias de entonces, bien conocidas, hubo muchos otros actores culturales, entre los que se encuentran los traductores, sin cuya valiosa contribución difícilmente se hubiera producido el florecimiento que entonces hubo. Se encontrarán aquí detallados perfiles de la vida y la producción de traductores y traductoras que se distinguieron en este periodo (y en ocasiones también en el posterior a la guerra), en especial vertiendo todo tipo de obras desde el italiano y también desde otras lenguas. Además de nombres hoy objeto de recuperación e incluso de reivindicación, como María Luz Morales, Ciro Bayo y Segurola o Rafael Cansinos Assens se ha estudiado la trayectoria de otros menos conocidos, como Francesc X. Godó i Llorens o José Prat. El renacer de varias realidades periféricas de España está bi