Recién llegada de Grecia tras el final de la Segunda Guerra Mundial,Lisa se instala en París, entre las plazas de République y Bastille.Para ella ?doble literaria de la autora?, todo es nuevo: laarquitectura de la ciudad, las costumbres de los parisinos, la ropa,los comercios? Al ritmo de sus paseos para explorar su desconocido ynovedoso barrio, asaltan su memoria acontecimientos aparentementealeatorios. Recuerdos que trae un rostro o la maleta de algúnviandante: la historia reciente de Grecia, la guerra, las ejecucionesy la hambruna ateniense de 1940; pero también su pasado en laResistencia, la clandestinidad, la lucha y, por supuesto, su vidasentimental. Entreveradas, estas remembranzas fortuitas se conviertenen eslabones necesarios que engarzan el poderoso fresco de su país deorigen con el suyo propio, de manera que su primer gran amor por unjoven resulta ser también el primer gran amor por el combate, por lajusticia. Surge así un retrato a la vez íntimo y político, al tiempoque ?como una improvisación de jazz? profundamente musical, de estajoven dividida entre su maltratada tierra natal y Francia, que «l